Es de sobra conocido que oír música, ya sea Rock, Pop, Jazz, Rap, Clásica, Flamenco, música electrónica o Ritmos Latinos, nos proporciona un inmenso placer. Lo que no todo el mundo sabe es que nuestro cerebro se deleita el doble cuando bailamos cualquiera de estos estilos musicales. En esencia, se debe a que, cuando sincronizamos los movimientos del cuerpo con una canción, se estimulan áreas de la corteza prefrontal que intervienen en la planificación y en la expresión de las emociones, ademas de conectar melodías y recuerdos y de favorecer la capacidad comunicativa y el buen humor. Pero también se pone en funcionamiento el cerebelo, implicado en la coordinación y la ejecución secuencial de movimientos, desde caminar hasta conducir, saltar a la comba, adoptar complejas posturas de Yoga o de ejecutar pasos de baile. Por otra parte se ha descubierto que algunos bailes concretos son terapéuticos como:
Tango contra el Párkinson: Bailar Tango puede reducir visiblemente los temblores propios de esta enfermedad neurodegenerativa. ademas, de acuerdo con una investigación realizada en la Universidad de Washington (EEUU), la práctica de este popular baile de salón argentino mejora el equilibrio de los enfermos más que cualquier otro tipo de actividad física.
Vals para el corazón: Romualdo Belardinelli y sus colegas del Instituto del corazón Lancisi, en Ancora (Italia), demostraron a través de una serie de experimentos que bailar Vals mejora la función cardíaca y la calidad de vida en personas que sufren cardiopatías crónicas o se recuperan de un ataca al corazón. Los resultados indican que el beneficio de este baile vienés es un poco mayor que el del ejercicio físico aeróbico que se suele recomendar a estos pacientes.
Salas antidepresiva: Las personas deprimidas pueden aliviar sus síntomas bailando salsa durante nueve semanas, según un estudio británico realizado en la Universidad de Derby. Los investigadores lo atribuyen tanto al ejercicio físico y la coordinación de movimientos que implica este son de origen cubano como a la interacción social que fomenta. Por si eso fuera poco, un informe del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos publicado en Breast Cancer Research, revelaba que practicar Salsa de forma frecuente puede reducir la incidencia de cáncer de mama en las mujeres.
Así que ya saben.... A BAILAR!!!
Elena Pérez-Grueso